Todo comenzó en el cabaret. Bueno, realmente el pole dance comenzó mucho antes y eso te lo contamos por acá, pero para efectos del tema que nos interesa, las bailarinas en el pole, nos remontamos a los clubes nocturnos y bailes de strippers específicamente. Quizás es por eso que cuando el pole dance comenzó a enseñarse en academias comenzó como una forma sexy de hacer ejercicio y entretenerse.
Las primeras academias en el país surigieron con esto en mente. De hecho, la primera en Venezuela, Joy Pole Dance, tenía un estilo muy sensual en sus inicios.
Pero no hay nada malo en esto, sin embargo, por estigma social y por querer hacer énfasis en el pole como deporte las academias, más temprano que tarde, comenzaron a muy distintivamente poner acento en el pole sport.
Es así como comenzamos a ver academias con la palabra “fitness” en su nombre y en las competencias no se permitía nada sensual, ni en la vestimenta ni en algún movimiento de la bailarina o bailarín.
Diríamos que el pole dance entró en la fase deportiva en la que, por demostrar un punto, y en Venezuela querer conformar a la disciplina como un deporte, cosas que nunca se logró ante las autoridades a pesar de esfuerzos por algunas personas hace unos 10 años, estaba mal visto hacer pole sensual. Al menos en las academias y en competencias.
Pero. ¿Dónde estamos ahora?
Estamos en una nueva etapa en la que se celebra el exotic por todo lo alto. Es más, en 2022 se llevó a cabo la primera presentación nacional de pole exotic, el Pole Exotic Show y en muchísimas academias se dan clases exclusivas de esta modalidad. Asimismo, 2023 será el primer año con una competencia exclusivamente sobre pole exotic.
¿Qué ha llevado a la disciplina a querer abrirse nuevamente a lo exótico? En otros países del mundo otras versiones de pole siempre han existido, incluida la exotic. En Estados Unidos las clases son más normales que sean en tacones, cuando en Venezuela es la excepción y se ve más en clases de pole exotic.
Por un lado puede tratarse de sencillamente una evolución del pensamiento en la sociedad venezolana y por otro lado que la disciplina se ha normalizado cada vez más. Como pole dancer ya no escucho comentarios de parte de hombres del estilo “¿cuándo me haces un bailecito?”, algo que hace una década atrás eran prácticamente la norma.
Incluso, cuando acudías al fisiatra por una lesión, estos no sabían qué era eso del pole dance. Hoy hasta hay especialistas y se conocen lesiones comunes.
¿Qué opinas tú? ¿Se está dando una nueva apertura hacia lo exotic? ¡Déjanos tu comentario!