Nuestro mundo del pole dance está creciendo cada año en muchos aspectos. Hay más y más estudios en todos lados y más personas se anotan en clases. También podemos ver que surgen nuevas competencias y que la formalidad del deporte también está mucho más clara (como por ejemplo el Código de Puntos de la Federación Internacional de Pole Sport, IPSF).

Me he estado preguntando cómo el pole podría ser en el futuro, digamos, dentro de diez años. Hace una década yo no tenía que esta práctica existía como algo que se puede hacer también fuera de los clubes nocturnos, y hoy todo el mundo sabe que puede ser un arte también.

Entonces, con el propósito de tener una idea de lo que el futuro podría contener para nosotras las pole dancers (y los pole dancers también), consulté con Davide Lacagnina, quien es actualmente presidente de la Federación Internacional de Pole Sports y Arte (IPSAF por sus siglas en inglés), gimnasta galardonado en Italia, y juez certificado de la IPSF, cuál es su opinión sobre esta materia. Asimismo, me puse en contacto con Elyor Ponce (conocida también como Coco D’Amore) quien es una artista del pole glamour y lyra en Venezuela, con la finalidad de conocer otra visión del futuro del mundo del pole.

Rápida evolución del deporte

Davide cree que no es muy fácil predecir mucho sobre cómo será el pole dentro de diez años ya que “este deporte es muy joven y crece rápidamente”, dice. “¡Piensa en el hecho de que el nivel de 2012 y 2013 es considerado hoy en día como ‘fácil’ de realizar!, continúa, y yo ¡coincido con él! Yo, Ermelinda Maglione, obtuve el primer lugar en una competencia en 2013 y hoy, cada vez que veo mi video nuevamente, pienso que ya no está en el mismo nivel de complejidad que se ve hoy en día en pole dancers amateurs. “Es la señal de que el pole está evolucionando rápidamente”, opina Davide.

Coco D’Amore coincide con lo anterior ya que ella ve al pole dance en el futuro como “algo que ha estado avanzando durante todos estos años: evolución en movimientos, aparatos, instructores“, dice. “Es una constante experiencia de aprendizaje y eso es lo que nos mantiene creciendo”, cree Coco.

Sin embargo, Davide también considera que

llegará el punto en el que el nivel de pole dance dejará de incrementar por un tiempo,

a no ser que los aspectos de ingeniería de la práctica cambien. “Si los poles que utilizamos actualmente se mantienen en material, diámetro, etc., entonces el crecimiento eventualmente se detendrá”, explica Davide, “pero si los aspectos físicos de las barras evolucionan, entonces podremos ser testigos de una máxima evolución desde el punto de vista técnico”.

¿Será el pole dance algún día un deporte olímpico?

Mientras Coco D’Amore cree que sí – y pronto – ya que considera que ya hay atletas que ya tienen un “nivel olímpico”, Davide piensa que nunca ocurrirá. “Las personas que deciden si el pole dance es un deporte o no (…) sólo ven la parte exótica o artística de la disciplina”, explica él. “Todas las versiones de pole tienen en común la herramienta, el tubo, pero no hay ninguna diferencia para quienes les toca decidir sobre esta pregunta si existe o no un lado más deportivo de la práctica”.

Davide piensa que ya que todavía hay personas que hacen pole de forma exótica, usando ropa muy pequeña y tacones altos (que admira y respeta, tal como me confesó en la entrevista), el pole dance nunca será considerado un deporte olímpico, a no ser que esto deje de suceder (que es poco probable, en mi opinión).

El presidente de la IPSAF también considera tristemente que dentro de diez años el pole dance pudiese ser considerado un deporte, pero no como uno oficial para las Olimpiadas. “Se mantendrá allí, casi en un limbo infinito que nunca llegará al nivel olímpico”, cree.

Dos estilos diferentes de pole dance

Ya que la pregunta sobre el pole dance en el futuro te obliga comparar el estilo glamour con el fitness, pareciera que dentro de diez años esta será la situación: dos mundos completamente separados.

¿Los atletas que practica pole exótico no están interesados en que el pole se convierta en deporte ya que para ellos es un baile, un show, un entretenimiento y un arte”, explica Davide, quien también indica que está el otro grupo de personas que desean desesperadamente que el pole dance sea una práctica mundial seria.

Coco D’Amore piensa que en el futuro las cosas se mantendrán igual, respecto a estas dos corrientes que existen. “Todo el mundo practicará el estilo que más le guste“, confiesa. Además piensa que ya no existirá tabú alrededor de esta disciplina ya que año tras año hay más aceptación e interés, e incluso admiración hacia el pole dance.

Desde otro punto de vista, Davide cree, según su experiencia, que en general el pensamiento de que el pole dance podría ser algo más que una práctica de clubes nocturnos no ha cambiado mucho y que aún hay mucho que enseñarle al mundo sobre los diferentes estilos que pueden practicarse. “A mi me han confundido en oportunidades como un ‘juez de lap dance’, ¿te imaginas mi cara”, me comenta.

¿Cuáles son tus predicciones del futuro del pole?

Ermelinda Maglione